DARK, descifrar el cuándo es la clave.

En 2017 Netflix estrenó con su sello una serie alemana, que rápidamente se ganó al público no solo europeo. Una serie que desborda calidad por todos sus costados, a la vez que te engancha capítulo a capítulo. Siguiendo el buen ritmo que parece que voy recuperando, en lo que a series se refiere, me toca recomendar la magnífica: DARK.


La trama nos sitúa en el año 2019, en un aparentemente tranquilo pueblo ficticio alemán llamado Winden, presidido por una gran central nuclear que proporciona trabajo a sus gentes desde hace décadas y en el que, una vez más, no todo parece ser lo que aparenta, donde sus vecinos guardan diferentes secretos, algunos bien oscuros. Todo se empieza a torcer con la desaparición de un chaval y dos niños que parecen habérselos tragado la tierra. Un año antes un hombre se suicida en el pueblo dejando un mar de dudas por los motivos. Otro niño es descubierto muerto poco después en el bosque, con graves heridas en el rostro y que la policía no logra identificar. Es entonces cuando la investigación comienza a complicarse, además de relacionarse con otra desaparición hace 33 años y las vidas de diversos vecinos entrelazarse dramáticamente, entre otras por pasados turbulentos. Todo ello rodeado por un halo de misterio constante que nos irá revelando un secreto oscuro e impensable, ya que la clave no es el dónde, sino el cuándo.

Como punto de partida, esto tendría que ser suficiente para que te sientes en el sofá y te conectes a esta serie. Pero no me quedaré solo en su sinopsis e intentaré convencerte, ya que esta es una de las mejores series de ciencia ficción con las que me habré topado en los últimos diez años y eso que soy de los que alucino con el Hombre en el Castillo, Stranger Things o la primera temporada de Wayward Pines

Hay quien asegura que los primeros 20 o 30 minutos de la serie son algo pesados y que lo bueno empieza después. A mí eso no me sucedió, puesto que desde el primer instante quedé prendado de ella. Tan solo con meterse uno mismo en la historia, empiezas a ir notando como se cuece, en esos 30 minutos, lo que puede estar por llegar, y digo puede porque capítulo a capítulo DARK logrará sorprenderte más y más. 

La trama y el guión se nota que están cuidados, nada queda pendiente y de ningún personaje sobra su historia, puesto que todos ellos aportan a la misma trama. Los saltos temporales entre 2019 y 1986, permiten al espectador conocer mejor a los personajes. Las actuaciones están excelentes, ayudando mucho con ello a creértelos y, por tanto, vivir lo mismo que viven. 

La ambientación invita al misterio, a mantener también esa tensión, esa angustia que se convierte en marca diferencial constante de una serie que utiliza la niebla y la lluvia, como elemento idóneo para crear esa dramática oscuridad. Con DARK, te mantienes agarrado al sofá esperando ir descubriendo más secretos de forma continua, con la grata sensación de que ese rato te valió la pena.

DARK es sin duda una opción muy sólida y recomendable. Tres son sus temporadas, seguramente que suficientes para quedar en lo más alto de cualquier podio personal, aunque la crítica sitúa el final de su tercera temporada, tal vez, en lo más decepcionante de la serie, empañando un poco todo ese nivelazo exhibido en su primera temporada y mantenido más adelante, aunque no estoy de acuerdo con ello.

Comentarios