Relatos Pandereta: Entre la niebla anunciadora.
"Es extraño errar en la niebla: cada cual está solo en ella. Ningún árbol conoce a su vecino. Cada cual está solo." John Le Carré - Llamada para el muerto (1961). Nos vimos obligados a replegarnos el último día de batalla. Fuimos pocos los que sobrevivimos a una masacre. Heridos tanto física como psicológicamente aguantamos hasta que nuestros mandos decidieron que aquello ya suponía suficiente sangría y, aunque reducidos en número y debilitados, nos ordenaron retroceder para reagruparnos, reabastecernos y esperar refuerzos para volver a atacar. Todos llegamos a esta guerra con la convicción de que nuestra causa era justa, de que nuestro país merecía practicamente por justicia divina arrebatar a aquellas gentes sus tierras, de que conseguiríamos nuestro objetivo practicamente sin pisar suelo enemigo, pero ahora muy lejos de nuestras familias y de nuestros hogares y tras esta dolorosa derrota, muy pocos son los que mantienen vivas esas firmes convicciones.