TERMINATOR ZERO, el renacer de la franquicia.

Cuando Netflix anunció un nuevo proyecto para la franquicia de TERMINATOR, centró rápidamente la atención de los fans de la misma. Esta vez sería una serie animada de estilo anime, una propuesta diferente a lo visto hasta ahora y que pretendía revitalizar la saga. Hoy mis impresiones tratan sobre la serie: TERMINATOR ZERO.

En el Japón de 1997, Malcom Lee dirige un importante y revolucionario proyecto, el desarrollo de una Inteligencia Artificial que rivalice con su homónima estadounidense Skynet. A medida que llega la fecha aciaga del Juicio Final, Malcom y sus tres hijos se enfrentan a un Terminator llegado del futuro, que los perseguirá incansablemente.

Si bien es cierto que los tres últimos intentos cinematográficos de la franquicia como fueron Terminator Salvation (2009), Terminator Génesis (2015) y Terminator: Destino Oscuro (2019) no funcionaron como se esperaba, la llegada de TERMINATOR ZERO en formato serie animada supone esa apuesta necesaria que le aporta ese aire fresco, además de comenzar a alejarse de la trama y personajes principales y del propio Terminator de Arnold Schwarzenegger, del que parece que todos intentan jubilarlo, pero nadie terminaba por conseguirlo.

El hecho de situar una historia nueva, paralela a la original, en otro país y otro continente, con protagonistas que viven situaciones que nos pueden sonar, pero que abren un abanico distinto gracias a las diferentes líneas temporales que se pueden generar, dependiendo de las consecuencias de cada una de las acciones de nuestros protagonistas, es ese cambio necesario que puede reflotar una franquicia, que sin estar hundida, sí que corría el riesgo de ir quedando en el olvido.

La trama de TERMINATOR ZERO despierta interés, tiene giros relativamente inesperados y momentos visuales atractivos a la altura de lo que esperas ver en la saga, así como escenas de acción que lucen muy bien. Sus personajes e historias son realmente dignos de ser canónicos para la saga a partir de ahora, aunque puede que, tal vez, la serie adolezca de diálogos demasiado largos y moralistas, corriendo el riesgo de perder la atención por momentos. Aun así, es justo esos dilemas morales que se plantean y las consecuencias de los mismos, lo que hace a TERMINATOR ZERO diferente a las últimas propuestas.

La animación, a cargo del estudio responsable de uno de los mejores animes de las últimas décadas como es Ghost in the Shell, le proporciona a la saga ese toque visual diferente que puede atraer a generaciones más jóvenes, que se vean atraídas por el universo creado en los 80 por James Cameron. También proporciona a sus creadores un potencial enorme, para explotar la trama mucho más a fondo que en una película o serie de acción real.

Si eres fan de la saga, no puedes perderte TERMINATOR ZERO, una apuesta fresca que se emancipa (al menos en parte) de los personajes más icónicos de la misma como el T-800 de Schwarzenegger, de John y Sarah Connor o de la propia Skynet como centro de todo lo que sucede o puede suceder, para plantearnos una nueva historia y personajes en los que pueda pivotar la franquicia en un futuro.