KING KONG & GODZILLA, origenes creativos y ficticios.

Desde bien pequeño he sido fan y cuando pienso en el cine de monstruos, esos gigantes destructores de ciudades y a la vez antihéroes, dos nombres son los que me vienen a la cabeza, los de King Kong y Godzilla. Realmente es así porque son los más representativos del cine, así como los primeros, al menos en viralizarse, allá por las épocas del cine en blanco y negro. Habitualmente sus orígenes ficticios se mencionan de pasada sin ahondar en ellos o, directamente se obvian, creando con ello más misterio sobre su pasado y el motivo de su existencia y monstruosidad. Si alguna vez te preguntaste el origen de la existencia de estos monstruos, puede que lo que leas a continuación te resuelva algunas dudas.

EL NACIMIENTO CINEMATOGRÁFICO DE LOS MONSTRUOS.

KING KONG. El primero de los dos en hacer aparición en la gran pantalla fue King Kong, allá por 1933 en la película de título homónimo. Fue la productora norteamericana RKO Pictures la que asumió la producción de un proyecto dirigido por Merian C. Cooper, que se basaba en una idea del propio Cooper junto a Edgar Wallace. 

El estreno fue todo un éxito que convirtió a King Kong en un fenómeno de masas, entre otras, por sus novedosos efectos especiales que marcaron época y sorprendieron al gran público. 

Convertido hoy en día en todo un icono de la cultura pop, no consiguió su punto álgido de popularidad hasta la década de los 70/80, gracias a diferentes remakes en una época en la que Hollywood pretendía recuperar la gloria de su pasado.

KING KONG no ha estado exento de polémica en sus inicios, puesto que sus primeras apariciones fueron consideradas y aún lo siguen siendo, por muchos, de corte racista. El espíritu colonialista y el racismo exacerbado en una sociedad con casos sonados a nivel histórico, además de la crisis económica derivada del crack del 29, llevaron a representar al rey gigante mono como la gran amenaza negra. 

En las décadas posteriores ese trasfondo se fue suavizando, hasta crear otro relato más acorde con los tiempos actuales.

GODZILLA. Godzilla sería el primero de los grandes Kaijū, que llegarían al cine japonés a partir de su estreno en 1954. Los míticos estudios Tōhō, nacidos en los años 30 y responsables de muchas de las películas de grandes monstruos japoneses, fueron los responsables de la producción de la primera película de Godzilla y de las casi una treintena que produjeron más tarde, exportando gran parte al mercado estadounidense, donde tuvieron gran acogida.

Se dice que Godzilla fue el resultado del éxito y admiración por King Kong, el gran monstruo estadounidense. Lo cierto es que la opinión más extendida es que Godzilla surgió de ese miedo que la sociedad nipona tenía, tras el fin de la Segunda Guerra Mundial y los ataques nucleares sufridos en Hiroshima y Nagasaki. Esa inquietud por lo que el uso de armas nucleares podrían provocar, fue todo ello, el detonante de la creación de Godzilla y su mensaje. 

Igual que sucedió con King Kong, Godzilla también fue modificando el mensaje con los años, dejando atrás esa representación de la masacre nuclear que sufrieron los japoneses, a otra cosa bien distinta y más enfocada al espectáculo y el entretenimiento.

SU ORIGEN EN LA FICCIÓN.

GODZILLA. Si nos centramos en las producciones japonesas, de Godzilla sabemos que es el resultado de continuados ensayos nucleares, llevados a cabo en mitad del océano. 

En una pequeña y remota isla llamada Odo, sobrevivía el último miembro de una prehistórica especie animal conocida como Godzillasaurus. Este era considerado un animal casi divino al que las gentes del lugar, temían y adoraban por partes iguales. 

Aquellas pruebas atómicas alteraron su ADN y lo convirtieron en un monstruo gigantesco, capaz de expulsar rayos de energía atómica por su boca, hibernar por temporadas largas y desplazarse por el océano a gran velocidad.

Pese a que las últimas adaptaciones de Hollywood, plantean su origen como el de una antiquísima especie superviviente de un tiempo remoto, en el que titanes monstruosos dominaban la tierra antes de la aparición del ser humano, lo cierto es que su origen siempre se ha identificado con la mano del hombre y las consecuencias de esas prueba atómicas en plena naturaleza.

Godzilla es considerado un antihéroe para los japoneses, porque a la vez que trae muerte y destrucción en sus ataques a las ciudades costeras de Japón, cuando estas se ven amenazadas por otros Kaijū, Godzilla hace su aparición para mantener a raya a sus enemigos ancestrales y conservar su status como Kaijū dominante.

KING KONG. Aunque su origen no siempre se concretó igual que el de Godzilla, si sabemos que procede de la misteriosa y remota isla Calavera. Un lugar ocultado por una cadena de tormentas perpetuas desde hace cientos de años. 

Dicha isla Calavera es una especie de mundo perdido, en el que sobreviven totalmente ajenos al resto del mundo, especies animales y prehistóricas gigantescas, además de una multitudinaria tribu de seres humanos que viven de la tierra y de costumbres propias de principios de la humanidad.

Estas personas veneran a Kong como su rey absoluto y protector, al que ofrecen sacrificios humanos para aplacar su ira. El Rey Kong, único superviviente de una saga de simios gigantes, mantiene el dominio sobre su territorio aplicando la fuerza contra otros seres monstruosos, que pretendan desplazarle o enfrentarlo. 

La isla Calavera podría mantener unas condiciones ambientales especiales, que favorecerían el gigantismo de muchos de sus animales e insectos, así como su asombrosa longevidad.

Y hasta aquí, esos orígenes de dos de los titanes más famosos, monstruosos y espectaculares del cine, que son actualidad recurrente a través de sus secuelas y remakes, que amplían unas sagas cinematográficas históricas.