San Knut, la despedida de la Navidad.

La Navidad todos empezamos a celebrarla habitualmente cuando uno despierta su espíritu navideño, pero ¿existe una manera de despedir la Navidad hasta el año próximo? En Suecia y Finlandia, tienen una fecha marcada en el calendario justo para eso. A esta festividad de clausura navideña, se la conoce como el Día de San Knut o Fiesta de San Knut. 

Su origen se remonta a la muerte del duque danés Knut Lavard, que fue también Príncipe y Rey de Dinamarca, el 7 de enero de 1131, fue asesinado por su propio primo Magnus Nilsson, que tenía la intención de usurpar el trono, algo que provocó una guerra civil en dicho país. Tras aquello, la iglesia canonizó a Knut Lavard, convirtiéndolo en Santo. Por tanto, el 7 de enero pasó a celebrarse en su honor el día de San Knut.

Como su celebración en 7 de enero se solapaba con la celebración de la Epifanía, que es el decimotercer día de Navidad, en 1680 se tomó la decisión de trasladar el San Knut al 13 de enero, conociéndose también como el vigésimo Día de Knut.

Aunque Knut Lavard fue Rey de Dinamarca, curiosamente la tradición de celebrar el Día de San Knut se lleva a cabo en sus países vecinos Suecia y Finlandia. De hecho, en Finlandia la tradición marca que para despedir la Navidad, algunos jóvenes de los pueblos se disfrazaban de cabra y visitan las casas de sus vecinos. Estos personajes conocidos como Nuuttioukki, merodean por las calles entrando en las casas donde exigen comida, generalmente las sobras de las comidas y de las bebidas alcohólicas de esas fechas. De no ser satisfechas sus exigencias, estos se dedicarán a realizar malas acciones a quienes les niegan sus demandas. Pese a todo, esta tradición se ha ido perdiendo con el paso del tiempo, siendo donde aún se mantiene viva la parte este y suroeste del país.

En Suecia, el Día de San Knut se celebra de varias formas. Las familias se reúnen junto al Árbol de Navidad dando vueltas a su alrededor, agarrándose de las manos y cantando: “La alegre Navidad se acaba. Nos despedimos del árbol que la adornaba, pero el próximo año, como testigo, volverá este nuestro viejo amigo, pues así nos lo promete ahora”. 

A partir de entonces, se inicia lo que se conoce como el Julgransplundring, una especie de ritual para despojar al Árbol de Navidad de sus adornos navideños. Se da la curiosa tradición de que en Suecia, se decora el Árbol de Navidad prácticamente con adornos comestibles, entre los que destacan dulces, galletas de jengibre, zumos… además de otras sorpresas escondidas. Es habitual que el 13 de enero los niños inviten a sus familiares y amigos para, de esta manera tan especial, retirar los adornos del árbol, dándose un dulce festín.

Una vez vaciado el árbol, se lleva a cabo otra curiosa tradición, la de lanzar el Árbol por la ventana, despojado previamente de sus adornos. Da lo mismo a que altura estés, ya que con cuidado se asoma la gente por la ventana, dejando caer, en un acto definitivo de dar por finalizadas las fiestas navideñas.

Empezar a celebrar la Navidad cada uno lo hace como y cuando realmente puede, pero para despedirla hay dos países que tienen el 13 de enero como el día para decirle adiós hasta el próximo año, con unas curiosas, divertidas y ancestrales tradiciones. ¿Adoptarías alguna de ellas?.