BATMAN en menos de 90 segundos #6.

Vuelvo con otra lectura que tenía pendiente y que recopila una de esas historias clásicas de Batman de finales de los 80. Desde esa gran serie de novelas gráficas que reunió a grandes autores del género, conocida como “Leyendas del Caballero Oscuro”, de la que recientemente escribí sobre uno de los títulos que la conforman como “Batman, más oscuro que la muerte”, la que me ocupa y que te recomendaré hoy a continuación en menos de 90” es: Batman, Chamán.

¡⏱️90”!

Se da la curiosidad de que la primera historia con la que DC inauguró el sello “Leyendas del Caballero Oscuro”, fue esta obra, Chamán, escrita por uno de los grandes del cómic norteamericano como lo fue Dennis O’Neil. Un Dennis O’Neil que fue reconocido durante su carrera, como otros grandes, por su excelente trabajo en editoriales como Marvel o la propia DC, pero que tenía en Batman a un personaje que sabía manejar y entendía a la perfección. Al dibujo estuvieron ilustradores como Ed Hannigan y John Beatty, que acompañaron a O’Neil en esta historia.

Mientras un Bruce Wayne en sus inicios como justiciero, se encuentra siguiendo una pista en las montañas de Alaska, es atacado y abandonado a su suerte en mitad de una tormenta de nieve. Contra todo pronóstico, es rescatado por unos nativos entre los que se encuentra un viejo Chamán que logra salvarle la vida y cambiarlo.

Esto tan solo es el principio de una historia narrada de forma excelente, en la que veremos a un principiante Bruce Wayne formándose por su cuenta como detective y justiciero, a la vez que define su propia imagen con la que infundir terror a los criminales. Sus diálogos y trama me encantaron. Una historia de descubrimiento en los primeros años de Batman, que lo hacen forjarse y mentalizarse como el héroe que terminará siendo. En el apartado gráfico, el dibujo es propio del estilo de aquella década, aunque con momentos y viñetas de gran nivel.

Chamán es una de esas historias autoconclusivas que no deberían faltar en la comicteca de cualquier fan de Batman. Porque Dennis O’Neil es uno de sus grandes y más reconocidos autores y porque la propia historia define, en parte, los inicios del superhéroe que conocemos.