Amenaza en el Planeta Rojo.

En un futuro próximo...

LA LLEGADA.

Ya hace veinticinco años que la Agencia Espacial, en colaboración con diversas agencias de otros países, iniciaron un ambicioso proyecto a nivel internacional. La MARS LIFE, es una misión importantísima para el futuro de la humanidad, tras la exitosa llegada una década antes de los primeros colonos a Marte. Una docena de personas de diferentes países con la mejor cualificación y preparación en diferentes campos de la ciencia, con tan solo cuatro militares de los más preparados para temas logísticos y de seguridad. Una vez asentados en el planeta rojo y con la base de Investigación Científica Internacional (ICI) sobre el suelo marciano, se puso en marcha inmediatamente un nuevo viaje, aunque esa vez solo viajarían máquinas. Los robots más avanzados con la mayor y mejor Inteligencia Artificial conocida hasta el momento, denominados Bob´s Mars, capaces de trabajar para y con el ser humano codo con codo, en uno de los lugares más hostiles, logrando la supervivencia de los humanos que llegaron y están por llegar. Los Bob´s Mars serían la pieza angular de la preparación y terraformación del planeta para la completa adaptación de los próximos colonos. Sin duda una de las más importantes y costosas misiones jamás llevadas a cabo, en las que residían las esperanzas de un futuro mejor lejos de nuestro enfermo planeta Tierra.


Nuestro viaje que duró cinco años, tres de ellos durmiendo en cápsulas de criogenización, fue más sencillo de lo esperado. Las décadas de diferentes misiones enviadas a Marte, más la llegada de los primeros colonos y de los Bob´s Mars, ayudaron a que no tuviéramos demasiadas complicaciones. La comunicación con la base del ICI para coordinar el aterrizaje se llevó a cabo con MADRE, el ordenador central de la base que nos guió a la perfección. Al tocar suelo marciano nuestras caras reflejaban una mezcla de emoción, preocupación y satisfacción, de hecho habíamos pasado mucho tiempo en el espacio con la mínima comunicación con la Tierra y con la duda, más que razonable, de que nuestro viaje no llegara a buen puerto por diferentes circunstancias.

Mi nombre es Andrew Sinclair, coronel del ejercito y comandante de la Liberty II, la nave con la segunda llegada de colonos a Marte. Conmigo llegaban tres militares y especialistas de rangofxo, el teniente coronel Randy Trachoswki y las capitanas Judith Duncan y Carla Vásquez, junto a diez colonos de diferentes nacionalidades preparados y entrenados para el relevo y trabajo diario en la ICI.

Al descender de la nave nos extraña que ninguno de los colonos estuviera para recibirnos. Lo acordado cuando iniciamos el viaje fue que el colono con mayor rango sería el que nos recibiría, pero allí no hubo nadie. Aterrizamos justo cuando en aquel sector se estaba iniciando una fuerte tormenta de arena, por lo que apremiamos a la tripulación a que se equipara con lo necesario y marchara urgentemente hasta el módulo de entrada, donde podríamos iniciar la descompresión y desinfección de nuestros trajes para acceder sin problemas a la ICI. Al ver desde fuera el complejo me pareció extrañamente mucho mayor de lo que esperaba para los tiempos de trabajo que tenían estipulados en la ICI, había visto de las imágenes que nos habían llegado a la Tierra que mostraban un complejo más pequeño, pero lo cierto es que en esos cinco años en el espacio, tanto los colonos como sobretodo los Bob´s, podían haber estado trabajando sin descanso en la mejora y ampliación del ICI, que servía a la vez de alojamiento permanente del personal de la colonia.

Al acceder por fin nos recibe uno de los Bob´s, el Bob IV, en total llegaron a Marte unos siete Bob´s de los que uno sufrió daños que lo inutilizaron poco después de su llegada:

BOB IV: Bienvenidos a Marte y a la ICI coronel Sinclair. Esperamos que el aterrizaje haya sido los más comodo para ustedes y su tripulación.
SINCLAIR: Muchas gracias, la verdad es que a sido todo un alivio llegar sin mayores consecuencias. ¿Puedo saber donde están el mayor Burke o el teniente Austin?
BOB IV: Lo siento, en estos momentos el mayor Burke está indispuesto y no pudo venir a recibirles.
SINCLAIR: Bien, ¿Y los demás mandos o encargados cientificos del ICI?
BOB IV: Lo siento de nuevo Coronel, pero están todos ocupados en el Área 1. Es el sector más antiguo de la base y recientemente sufrió un accidente.
SINCLAIR: No recibí notificación al respecto. Solicitó un informe inmediato de lo que sucedió, daños, bajas...
BOB IV: Lo recibirá todo en la mayor brevedad posible coronel. Sobre el accidente aún estamos averiguando cuales fueron los motivos, aunque al ser el sector de la base más antigua puede que haya sido un problema técnico. Sufrimos cuatro bajas, tres de nuestros cuatro oficiales militares, entre ellos el teniente Austin, y uno de nuestros geólogos. Pero no se preocupen, tenemos controlada la situación. Les ruego se acomoden en sus dormitorios que están completamente equipados para lo que necesiten. Dentro de dos horas el personal se reunirá para la cena.

Aquello me pareció una alteración importante en las normas de comunicación estipuladas para la ICI, así como una falta de protocolo, sobretodo entre mandos militares. Aún así decidí dar permiso al resto de los colonos para que se instalaran en sus respectivas habitaciones y descansaran, aquello iba a ser nuestro hogar para el resto de nuestras vidas, pero no dejaba de observar cosas extrañas en todo aquello. Me aparté un momento junto a mis dos capitanas y mi teniente coronel para hablar sobre la situación en la que nos encontrábamos:

SINCLAIR: Algo no me cuadra en todo esto. ¿Donde está el personal de la ICI? Los Bob´s están preparados para supervisar y asistir al personal colono, pero no para responsabilidades atribuidas al personal de rango de la base o para MADRE, en caso de necesidad.
TRACHOSWKI: Cierto señor. Además el Área 1 es donde se ubica MADRE. Si la cosa estuviera tan mal, no creo que MADRE hubiera podido dirigirnos en el aterrizaje.
SINCLAIR: Eso pensaba yo también.
VÁSQUEZ: ¿Debemos alertar a Tierra?
SINCLAIR: Tierra no recibió alerta alguna, nos hubieran informado antes de nuestra llegada, por lo que entiendo que ellos desconocen si algo va mal. A no ser que hubiese sucedido algo inesperado recientemente. En tal caso, estamos a años luz de casa, por lo que cualquier mensaje de Tierra tardaría en llegarnos. Y para alertar de cualquier problema, deberíamos llegar a la central de comunicaciones que está en el Área 1 y activar los protocolos de emergencia de MADRE. Propongo mantenernos alerta, controlar de cerca a los Bob´s y averiguar donde demonios están los demás. De ser necesario activaríamos la orden de desconexión temporal de los Bob´s y tomaríamos el mando total de todas las actividades de la ICI. Vásquez y Duncan, terminen de descargar todo el equipaje necesario, víveres y material científico. Guarden con celo las armas a bordo y munición, tengámoslas controladas. Trachoswki averigüe donde coño está el mayor Burke y el resto de los primeros colonos y entérese de lo que está pasando.

Estábamos preparados para cualquier contingencia a nuestra llegada, pero aquella situación me hacía sospechar que algo raro estaba sucediendo. Algo que debíamos averiguar para asegurar la supervivencia de la misión y de los mismos colonos.


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CAMBIO DE PLANES.

Llevamos horas confinados en el mismo módulo, el módulo habitable que conforma los dormitorios, zonas comunes de descanso y recreo, además del amplio comedor con acceso a cocinas. Un módulo reformado y ampliado no hace muchos años cuando se empezó a preparar la llegada de la segunda oleada de colonos, al poco tiempo de la llegada de los Bob´s Mars. La gente empieza a estar inquieta y hace preguntas que no sabemos contestar. A penas nos han permitido traer nada más que el material científico y logístico que portábamos en la Liberty II. Todo lo demás, por seguridad a causa de la tormenta de arena, es secundario. Aún así las capitanas han logrado eludir el marcaje de los Bob´s y asegurar las armas a bordo del Liberty II. Es hora de actualizar la situación:


SINCLAIR: Bien, ¿que tenemos hasta ahora?
TRACHOWSKI: Por mi parte nada señor. No nos permiten acceder por el momento a los siguientes sectores del ICI, según especifican los Bob´s "por seguridad". En los habitáculos de descanso no he encontrado rastro de los primeros colonos, parece que ellos no han estado aquí, posiblemente no se hayan mudado nunca aquí, algo que me parece extraño... Si le soy sincero señor, ¿no se como? pero creo que estas malditas máquinas esconden algo.
SINCLAIR: Agradezco su sinceridad teniente. Continúe buscando, tiene que haber algo que se nos escape. ¿Capitanas, que tal fue a bordo de la Liberty II?
DUNCAN: Logramos descargar lo que los Bob´s y el temporal marciano nos permitió. Vásquez logró ocuparse de las armas.
SINCLAIR: ¿Y bien?
VÁSQUEZ: He logrado disimular su situación, pero dudo que MADRE no tenga el inventario de la Liberty II, por lo que en cualquier momento se nos puede requerir que las movamos. Aún así, he conseguido colar cuatro armas cortas que podamos esconder en los uniformes.

En ese instante y con el mayor de los cuidados, es cuando Vásquez nos hace entrega a cada uno de unas pistolas con cargador extra que rápidamente introducimos entre nuestros uniformes.

SINCLAIR: Buen trabajo Vásquez. Bien, creo que todos estamos de acuerdo con que aquí algo no funciona como es debido. Por lo que la misión corre peligro y ¿quién sabe si la vida de los colonos también?. Así que, por ahora, nuestra prioridad deja al margen la seguridad y correcto progreso logístico de la misión científica y pasamos a volcarnos, 100% en la seguridad del personal humano del ICI, además de averiguar que coño está pasando. Para ello necesitamos no mostrar nuestras armas e intentar cooperar para llegar un poco más lejos, al menos hasta que logremos rascar algo de lo que se esconde tras esas escotillas. Después, aseguraremos el Área 1, si es necesario, y accederemos a MADRE para asegurar el control de todo el complejo.

Suena fácil, pero es lo que debemos hacer para salvaguardar la vida de los colonos que tenemos junto a nosotros. En ese momento accede al comedor, donde llevábamos esperando ya unas horas, uno de los Bob´s Mars al que el personal científico empieza a exigir respuestas:

BOB I: Tranquilidad señores en breve los trasladaremos a un nuevo Área donde podrán empezar a trabajar de inmediato. Ahora, descansen. Han hecho un viaje muy largo.
SINCLAIR: ¿Cúal es el motivo por el que seguimos sin noticias del personal que ya residía en el ICI?
BOB I: A su debido tiempo conocerá todos los por menores coronel Sinclair.
SINCLAIR: ¿Por menores? Exijo hablar con la persona de mayor rango al mando de la gestión del ICI y acceder a MADRE para consultar estado y seguridad del mismo.
BOB I: No es correcto exigir coronel. En cuanto se nos permita será informado.
SINCLAIR: De acuerdo Bob I, ¿quién os puso al mando? No estáis programados para dirigir, si no que para ejecutar nuestras ordenes y las del personal científico y/o logístico de la colonia. Así que, como la persona de mayor rango del complejo, te ordeno que me lleves ante MADRE y los colonos ya residentes ¡AHORA!. Debo comunicar a Tierra nuestro estado y la situación en la que nos encontramos.

Me encuentro cuadrado frente al Bob Mars I y con las manos a la espalda, dando una imagen de autoridad ante esa máquina. Tras de mí Trachowski, Duncan y Vásquez forman de igual manera. Durante unos segundos el Bob I se mantiene extrañamente inmóvil, hasta que de golpe acciona sus piernas retráctiles situándose en altura superior a la nuestra y, sin apenas poder reaccionar, me agarra del cuello con sus garras metálicas y frías fuertemente, levantándome y dándome la vuelta para situarme frente a mis hombres y los colonos que observaban atónitos la situación. De la escotilla por la que el Bob I había accedido aparecen cuatro Bob´s más que se colocan tras el Bob I, escoltándolo e irguiéndose de igual manera para infundir temor y respeto entre el personal humano. Sin dejar de apretar el cuello fuerte, pero con cuidado para no hacerme más daño del debido, deja de levantarme por los aires y me apoya en el suelo:

BOB I: ¡ATENCIÓN! Todo personal que siga con actitud desafiante y hostil, será apresado y juzgado debidamente. Coronel Andrew Sinclair, cumpliendo con el artículo 36 del apartado de seguridad del ICI, queda relevado de su cargo y pasará a confinamiento hasta decidir su castigo.

Mis hombres aún no han sacado las armas, aunque intuyo que pueden hacerlo en cualquier momento, por lo que decido intentar calmar los ánimos, si es que se puede conseguir eso con unas máquinas:

SINCLAIR: Arrrjjj... No, no esperar. Tranquilos todos. Lo siento, no era mi intención incomodar a nadie. Bob I, acepto seguiros hasta mi celda de confinamiento a cambio de que el personal restante no sufra mis consecuencias. Soy totalmente responsable de mis actos y asumo lo que pueda llegar.

De nuevo unos segundos que se hacen eternos, hasta que los Bob´s vuelven a su estado habitual y Bob I me suelta. Casi caigo al suelo mientras intento tomar algo más de aire del que estaba consiguiendo mientras me agarraba. Levanto la mirada hacia Trachowski y le guiño el ojo, además de hacerle un gesto con la mano en la que le pido que espere. Espero que los años de trabajo y entrenamiento juntos le haga entender lo que quiero conseguir, confío plenamente en él. Entonces los Bob´s me acompañan finalmente hasta más allá de la escotilla por la que no nos permitían acceder, quedándose un par de Bob´s en la sala del comedor donde todo se había complicado de golpe. 

Los Bob´s me conducen por pasillos semioscuros durante un tramo largo y por los que no veo a nadie del personal del ICI, hasta llegar a una escotilla que abren. Allí dentro, tumbado en una litera metálica, con la pierna derecha vendada y con la frente igual, con manchas de sangre visibles, alguien que creo es el mayor Burke. Los Bob´s me introducen dentro y sellan la compuerta.

SINCLAIR: ¿Mayor Burke?
BURKE: Mmmm... buufff... supongo que usted es uno de los de la Liberty II. Hacía tiempo que les esperábamos. Sinceramente hubieran tenido más suerte estrellándose en el aterrizaje.
 
Continuará...


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