¿Saben que me saca de mis casillas?: La gente que necesita ocupar más espacio del que realmente necesita.

Concretamente lo que me saca de mis casillas es que cuando entro en un vestuario haya alguien que esté ocupando más espacio del que debería, invadiendo el espacio que te correspondería para cambiarte o incluso moverte sin tener que rozarte ni tener que apartar objetos ajenos.


Digamos que llegas a un vestuario ya sea el de tú trabajo, gimnasio o lo que sea, y te encuentras que uno de tus vecinos más próximos de taquilla tiene extendido por prácticamente todo el banco donde sentarse para cambiarse toda su ropa, mochila y demás objetos personales de higiene personal, smartphone, etc. ¿Que debes hacer? ¿Abrir tú taquilla coger o dejar lo que necesites en ella y retirarte unos metros donde puedas sentarte y cambiarte tranquilamente? o ¿reclamar tú espacio en todo esa demostración de expansionismo sin complejos? Está claro que reclamar aunque sea ese mínimo de espacio delante de tú taquilla es lo más correcto, pero en muchas ocasiones espero por parte de la otra persona un mínimo de cortesía y que salga de ella misma retirar todas sus pertenencias de las que no hay necesidad de expandir por todos lados. En ocasiones me encuentro cierta buena educación aunque en otras parece que ni tú humilde presencia altera lo más mínimo el mundo que se a creado a tú alrededor. Entiendo que cada un@ en su casa se organiza como quiere, habrá quién vacíe su armario desplegando su ropa por el dormitorio, habrá quién dentro de su caos encuentre un cómodo orden... pero lo que no llego a entender es como fuera de casa en un lugar que estamos obligad@s a compartir con otras personas, hay quién es incapaz de entenderlo demostrando una inconsciente capacidad de colonización del espacio ajeno. No es necesario que esa persona que ocupa como si todo aquello fuera suyo el mayor metro cuadrado de espacio esté allí cuando llegas, ya que se da la casualidad de que también sucede cuando esas personas llegan y estás tú en el lugar, haciéndote retroceder y casi encogerte inconscientemente mientras el/a otra@ persona va invadiendo más espacio incluso sentándose casi espalda con espalda cuando no es para nada necesario ya que dentro de su territorio ocupado tienen suficiente espacio.

Esto no sucede solo en cualquier vestuario, sucede igualmente en lugares como la playa con aquellas personas que ocupan por derecho propio un pequeño hueco de arena desde el cuál van poco a poco reclamando mayor espacio a su alrededor. Todo esto me hace pensar que existen personas que conscientes o no necesitan mayor contacto humano, aunque con ello invadan el espacio vital de los demás. Autenticas lapas humanas pesadas y molestas a las que en muchas ocasiones me daría ganas de comprobar como actuarían si me encontraran con todas mis pertenencias revueltas alrededor y a mi prácticamente metido en sus taquillas en pelotas en su cara vistiéndome con espacio a mi alrededor en el que respetar sus propios espacios.

Se que igual alguien que me conozca de vista y me pueda llegar a leer se pueda dar por aludido. No me importa lo más mínimo, de hecho con esto espero que sepa que estas son algunas de esas situaciones que me sacan de mis casillas.

Comentarios